La familia de Melania busca fondos para su operación.
Para que esta joven, con espina bífida, sea intervenida en la clínica privada madrileña MDS 360 se necesitan 45.100 euros y se llevan recaudados 16.000.

Melania Anaya Cortina es una joven ceutí de 20 años que sufre espina bífida y necesita recaudar miles de euros para poder ser intervenida en Madrid. Su madre, Pepi Cortina Canto, habló con este diario.
Melania nació en Ceuta y nada más nacer “ya se le veía un bultito en la espalda y se dieron cuenta de que tenía espina bífida. La evacuaron rápido para el Materno de Málaga”, relató su madre.
Allí lo primero que le hicieron fue ponerle una válvula en la cabeza “porque ella tiene espina bífida e hidrocefalia. Se corría el riesgo de que el líquido cefalorraquídeo le subiera a la cabeza y se le hinchara”.
A la semana de esa operación “le hicieron dos incisiones en los lados para poder cerrar la zona abierta, porque ella nació con la columna abierta”. La espina bífida “es como una malformación y ella nació sin que se le terminaran de cerrar las vértebras”, expuso Cortina.
La infancia de Melania fue “feliz. Cuando fue teniendo un poco de sentido común ya lo fue notando. Cuando yo la llevaba en el carro la gente le decía que era muy mayor para ir en el carro y ella contestaba que estaba malita”. Melania ha sido consciente de la enfermedad que tiene y lo que conlleva.
Desde que nació ha sido sometida a varias operaciones. “Le pusieron una especie de clavos para mantenerle porque los pies se le estaban deformando. Al cabo de los años esta operación no ha servido para nada, porque ha vuelto otra vez hacia atrás”.
En distintas etapas de su vida Melania ha sido intervenida en ocho ocasiones. La más reciente fue cuando le quitaron en Sevilla los clavos que le pusieron cuando tenía ocho años.
Todas las operaciones de Melania han sido fuera de Ceuta. Por otra parte su madre comentó que “lo poco que anda, lo hace muy inclinada”.
En cuanto a la atención que recibe en su ciudad natal la atiende el urólogo “cuando cumplió la mayoría de edad. El traumatólogo me sirve a mí para trámites de evacuación o si necesito algo, pero la ven los médicos fuera. Ella tiene un especialista para cada cosa”.
Recientemente estuvo en la revisión de la válvula en el Hospital Carlos Haya de Málaga y en Sevilla la está viendo el traumatólogo. “Noté que se le estaba doblando la cadera, los pies los arrastra. El traumatólogo de Ceuta me mandó al mejor especialista que hay, que es Carranza en Sevilla, pero a mí me ha ido muy mal”.
Cada vez que iba “la veía un médico distinto. Si a ti te ve un médico diferente ese médico no sabe la trayectoria que tiene la niña. Se suponía que de primera hora la tenía que ver este señor, pero a ella no la ha visto hasta los dos años de estar yendo y viniendo”, comentó Cortina.
Le plantearon que “la iba a operar de los pies, pero que no esperara nada más que una mera corrección de los pies. Dije que no, hasta aquí hemos llegado, ya no aguanto más. Traté por todos los medios que me mandaran a Madrid”.
Hasta este momento todo el proceso se ha seguido en la Seguridad Social. El siguiente paso es la sanidad privada.
Operación pendiente
“He ido a tres médicos distintos de Madrid”, apuntó la madre. La posibilidad que hay sobre la mesa está en intervenirla en la Clínica MDS 360. “Necesita una operación bastante engorrosa, porque le tienen que tocar músculos, cortar tendones y huesos”, dijo.
La operación costaría 45.100 euros en esta clínica privada madrileña. “Entre viaje y operación nos costará más de 50.000 euros y vamos por la cantidad recaudada de 16.000 y pico”.
Aparte Melania “tendría que estar haciendo rehabilitación. La tengo a dieta, está yendo a natación y necesita un monitor para que empiece ya con ella”.
El trabajo con el monitor duraría dos años, ya que “tendría que volver a aprender a andar”. Ese proceso sería ya en Ceuta, aunque tendría que volver ocasionalmente a Madrid.
La primera cura es la más complicada y el médico “se ha ofrecido a viajar hasta Málaga, si le pagamos el Ave, para que la niña no tuviera que hacer ese viaje y más recién operada”, añadió la madre de Melania.
“Tengo ganas de operarme y esperanza de curarme”
Melania Anaya comentó a este diario que está bien. “Llevo bien la enfermedad”. Melania estuvo estudiando en el Colegio San Daniel, pero ya lo dejó porque “me resultaba muy difícil y no hago nada ahora mismo”.
Esta chica lleva operada desde pequeña, “así que no me resulta difícil ni nada. Lo llevo con normalidad”. El Colegio San Daniel “se ha volcado mucho” y también el José Acosta. “Tengo ganas de operarme y esperanza de curarme y animo a todos los ceutíes a ayudarme, que lo agradezco mucho”.
La familia agradeció a las instituciones que han colaborado con ella.