“El diálogo y el consenso son los dos firmes pilares sobre los que se levanta y sostiene el edificio de la democracia”
POLÍTICA
La delegada del Gobierno, Salvadora Mateos recuerda que "la Carta Magna nos ofrece una serie de instrumentos para tratar de resolver los problemas que se van suscitando en cada periodo”
La delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, fue la primera en tomar la palabra durante el acto conjunto entre Ciudad y Delegación por el Día de la Constitución. Así, recordó que “hace 41 que se promulgó nuestra Constitución, 41 años para estar orgullosos”, exclamó para recordar que “la Constitución española de 1978 es la norma suprema del ordenamiento jurídico español, a la que están sujetos todos los poderes públicos y ciudadanos de España desde su entrada en vigor”.
Mateos subrayó que “los logros de estos 41 años han sido desde luego una estabilidad, un desarrollo económico, social y cultural sin precedentes en la historia de nuestro país”, reivindicando “el compromiso de entendimiento, concordia y reconciliación del que hicieron gala los protagonistas de la Transición para que nadie quedase excluido”.
La delegada destacó que “la Constitución que salió de aquel consenso ha permitido tomar importantes decisiones sobre nuestra organización política, social y económica, y desarrollar nuestro Estado del Bienestar y autonómico”, añadiendo que “en aquellos momentos se impuso el pragmatismo sobre la ideología. Además, quiero recordar que la forma política del Estado español es la monarquía parlamentaria”, insistió la delegada, que continuó relatando que “primó en todo momento la generosidad para llegar a un consenso y se impuso el interés colectivo para poder consolidar la democracia que hoy disfrutamos”.
En cuanto a la Carta Magna, Mateos indicó que “nos ofrece una serie de instrumentos para tratar de resolver los problemas que se van suscitando en cada periodo”, asegurando que “el diálogo y el consenso son dos firmes pilares sobre los que se levanta y sostiene el edificio de la democracia”.
En este sentido también expresó que “el diálogo, en democracia, es su seña de identidad, pues perseverar en el diálogo es importante en una época como la actual, determinada por profundos cambios en todos los ámbitos”. Así, continuó diciendo que “ante las tensiones que se generan es necesario potenciar el diálogo para articular democráticamente las múltiples identidades existentes, pues el diálogo es un recurso de gran valía para evitar que las tensiones que genera la diversidad tengan como resultado la exclusión, la fragmentación y la violencia”.
Por último, la delegada recordó que “la destrucción ecológica llevada a cabo por los seres humanos nos ha abocado a situaciones en las que es difícil prever y decidir acerca de riesgos, dada la incertidumbre existente sobre algunos de ellos y su evolución, como es el caso del cambio climático”.