Transportes no asegura la viabilidad del túnel del Estrecho que una España y Marruecos

El proyecto de un túnel submarino que conectará España y Marruecos a través del Estrecho de Gibraltar ha vuelto a cobrar protagonismo en los últimos meses, impulsado por nuevas licitaciones promovidas por el Gobierno español. Sin embargo, su viabilidad sigue siendo incierta, incluso entre sus principales defensores, debido a la complejidad técnica y el elevado costo de la infraestructura.

Según informa El Independiente, el Ejecutivo de Pedro Sánchez ha reforzado su apuesta por la iniciativa con una nueva dotación presupuestaria para la Sociedad Española de Estudios para la Comunicación Fija a través del Estrecho de Gibraltar (SECEGSA), una empresa pública creada en los años 80 para analizar la factibilidad del proyecto. Durante décadas, esta entidad ha funcionado sin avances significativos, limitándose a custodiar los estudios previos sobre la obra.

Uno de los últimos pasos dados ha sido la adjudicación a la empresa Herrenknecht Ibérica, filial de la multinacional alemana Herrenknecht, de un contrato valorado en 296.400 euros para la realización de estudios geológicos. La firma, especializada en perforaciones y construcción de túneles, se encargará de evaluar la factibilidad de excavación en el Umbral de Camarinal, una de las zonas más críticas del trazado propuesto.

La viabilidad del túnel ha sido defendida en varias ocasiones por el ministro de Transportes, Óscar Puente, quien en su visita a Rabat el pasado año reafirmó su compromiso de avanzar en los estudios necesarios para materializar el enlace fijo entre Algeciras y Tánger. A pesar de estos anuncios, el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha evitado proporcionar detalles sobre el estado de los análisis en curso. Consultado por El Independiente, el departamento dirigido por Puente se ha limitado a señalar que el proyecto aún se encuentra en fase de estudio y que su viabilidad no podrá determinarse hasta que concluyan las investigaciones técnicas.

El elevado coste de la infraestructura sigue siendo el principal obstáculo. Rafael García-Monge, exsecretario general de SECEGSA, explicó a El Independiente que hace tres décadas la obra tenía un coste estimado de 13.000 millones de euros, cifra que hoy podría superar los 26.000 millones. Esta inversión se ha convertido en un factor determinante que ha retrasado la ejecución del proyecto a lo largo de los años.

El plan inicial, ideado en 1989, contemplaba la construcción de un puente, aunque en 1995 la propuesta fue sustituida por un túnel ferroviario similar al Eurotúnel entre Francia y el Reino Unido. Según los primeros diseños, la infraestructura estaría formada por dos túneles paralelos de vía única con un tercer túnel de servicio intermedio. Con 27,7 kilómetros bajo el lecho marino, permitiría el tránsito de trenes de pasajeros y mercancías en ambos sentidos, reduciendo a menos de media hora el trayecto entre ambos continentes.

Si el proyecto llegara a concretarse, el túnel España-Marruecos se convertiría en una de las mayores obras de ingeniería de su tipo a nivel mundial. No obstante, los desafíos técnicos y logísticos que implican su construcción siguen generando incertidumbre. Desde la compañía alemana adjudicataria de los estudios reconocen que el Estrecho de Gibraltar representa un "cuello de botella" para el comercio y el transporte entre Europa y África, y que un enlace fijo mejoraría la eficiencia de estas conexiones. Sin embargo, permitirá que el túnel plantee retos extremos cuya solución aún esté en fase de evaluación.

Sigue el canal de El Pueblo de Ceuta en WhatsApp. Pincha aquí, dale a SEGUIR y encontrarás toda la actualidad informativa de la jornada ceutí