La policía que queremos
La Policía Nacional ha dado un importante golpe al narcotráfico en el Estrecho con el desmantelamiento de una organización criminal que se dedicaba a transportar droga desde el país vecino de Marruecos hasta Ceuta, introduciendo la droga en pequeñas cantidades oculta en vehículos que pasaban por la frontera del Tarajal para, posteriormente, acudir al lugar de entrega donde la droga era almacenada hasta contar con una importante cantidad para enviarla, a continuación, hacia la Península oculta en camiones. Una labor de investigación llevada a cabo durante muchos meses que conviene que destacar y valorar.
En este sentido, las operaciones de la Policía Nacional empiezan a dejar de ser una casualidad, para ser el reflejo de un trabajo bien organizado, a pesar de carecer en muchas ocasiones de los medios humanos y materiales que serían deseables. Esta vez ha sido el narcotráfico. Hace unos días fue el terrorismo yihadista. Y mañana .... Gracias a la actuación de las fuerzas de Seguridad en el Estado, de todas y cada una de ellas, es posible garantizar la seguridad de los ciudadanos respetando sus derechos y libertades. Es un lugar común en cualquier análisis o debate sobre seguridad pública y derechos ciudadanos que la libertad y la seguridad son dos caras de la misma moneda, y que no es posible la una sin la otra.
Además, en días como hoy es bueno recordar que la Guardia Civil es una de las instituciones más valoradas en España, como también lo son la Policía y las Fuerzas Armadas. Un dato que no hay que olvidar porque hace falta mucha profundización cívica y que los ciudadanos conozcan sus derechos y sepan defenderse, para que estas instituciones puntúen tan alto. La confianza en las Fuerzas de Seguridad es un buen síntoma, a pesar de que gente proclive al abuso hay en todas partes, como se ha demostrado.