Los partos en Ceuta se reducen a solo 651, la mitad que en 2019
NACIMIENTOS
Según el Ingesa, en 2021 en el HUCE se atendieron apenas 651 partos. Un 50% menos que en 2019, antes de que llegase la pandemia y se cerrase la frontera
Los sanitarios de la Unidad de Tocoginecología del Hospital Universitario de Ceuta atienden ahora menos partos que hace dos años y que el año anterior también. El descenso de la natalidad, un 19,7% menos en Ceuta, y el cierre de la frontera con Marruecos han hecho que en dos años se hayan reducido a la mitad las mujeres que se acercan hasta el HUCE a tener a sus hijos.
Que la Ceuta actual es distinta a la 2019 no tiene lugar a dudas. Una frontera cerrada que convierte a ciudad casi en una isla, una pandemia que nos obliga a llevar mascarilla y una crisis fronteriza que sumó más problemas a una ciudad ya de por sí complicada, ha afectado a la economía y también a la sociedad.
El número de nacimientos es uno de los aspectos que se ha visto afectado por esta combinación de situaciones. En 2021 nacieron en el Hospital Universitario de Ceuta un 50% menos de niños que en 2019. Es decir, en apenas dos años se han reducido a la mitad los alumbramientos registrados en la ciudad autónoma.
En 2019 hubo 1.261 partos en el HUCE según informa el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa). En 2020 los nacimientos ya se redujeron en un 30%, el año en el que llegó el coronavirus se registraron 867 partos, frente a los apenas 651 que ha habido este 2021, la mitad que hace dos años y unos doscientos menos que el año pasado.
Con estas cifras, es evidente que la falta de afluencia de personas desde el otro lado de la frontera es una de las causas de este acusado descenso de los nacimientos en el clínico de Loma Colmenar. Pero no la única. El descenso del año pasado en relación a 2020, está relacionado con la ya constante bajada de la natalidad.
Cuando la frontera estaba abierta era habitual ver a mujeres embarazadas que cruzaban desde Marruecos a Ceuta para ser atendidas por los sanitarios y hacer uso del servicio del clínico de Loma Colmenar. Según la diferencia en el número de alumbramientos con la frontera abierta y cerrada, se ha podido cuantificar aproximadamente que eran alrededor de 400 mujeres marroquíes las que al año venían a tener a sus hijos a Ceuta.
Cabe destacar que estos datos solo hacen referencia a los nacimientos en el Hospital Universitarios y que no incluyen ni los partos atendidos en domicilios particulares ni los alumbramientos en los centros sanitarios de la Península.
A la cabeza del descenso de la natalidad en España
Al margen de la situación geográfica concreta de Ceuta que influye directamente en la atención sanitaria, la crisis económica o la sanitaria también han influido en las familias que se han pensado dos veces si ampliar su estirpe. El INE cifra en casi un 20% la caída de la natalidad en la ciudad autonóma en este último año, frente a la media nacional, ligeramente por encima de una caída del 3%.
Según los últimos datos que el Instituto Nacional de Estadística publicó en diciembre, con los nacimientos de enero a octubre de 2021, porcentualmente, con un 19,7, Ceuta era el territorio donde más había bajado la natalidad respecto al mismo periodo del año pasado.
La siguiente comunidad en la lista, lejos de ese casi veinte por ciento, es La Rioja, con un 11,7% menos de nacimientos registrados. Melilla ocupa el tercer puesto a nivel nacional con un descenso ligeramente inferior al 10%, en concreto un 7,5%. El pódium lo cierra Castilla la Mancha con 7,01% de nacimientos menos que en 2020.
Aunque en términos absolutos (número total de nacimientos) sean las comunidades más pobladas de España las que han registrado una mayor caída de los nacimientos (Madrid y Cataluña), Ceuta sigue estando a la cabeza. Aragón lidera la lista en sentido contrario: es la comunidad en la que más han subido los nacimientos, un 7,32%.
Los datos que recoge el INE, así como los ofrecidos por el Ingesa, vienen a confirmar un año más la tendencia a la baja de los nacimientos tanto en Ceuta, como a nivel nacional. En diciembre y enero de 2020, nueve meses después del confinamiento más duro, el descenso de la natalidad tuvo un pequeño respiro gracias a la leve subida de natalidad que ha vuelto a recuperar su tendencia a la baja al margen de la pandemia del coronavirus.
El sociológo Jose Miguel Cantón, profesor asociado de la UGR: “El descenso en la natalidad se está dando por una cambio sociológico”
La pequeña subida de la natalidad que se registró en diciembre y enero de 2020, nueve meses después del confinamiento más estricto por la pandemia del covid, alimentó la esperanza de romper, por una vez, la tendencia a la baja en el número de nacimientos que se llevaba dando desde hace alrededor de seis años. Pero un año más, se confirma la tendencia a la baja de la natalidad.
José Miguel Cantón Galvez, profesor asociado de Sociología de la Educación de la Universidad de Granada, defiende que aunque la bajada de partos atendidos en el hospital de Ceuta se explique en parte por el cierre de la frontera, la caída de casi un 20% de 2020 a 2021 que registras el INCE responde más bien al cambio sociológico que comenzó cuando la mujer entró en el mercado laboral.
“La madre nacional se espera a que esté estabilizada laboralmente quizá para formar una familia y con edades mucho más tardías con lo cual la edad fértil de la mujer entorno a los 14-15 hasta los 49, se reduce muchísimo y por eso también tienen muchos menos hijos”.
A pesar de que a medida que avanzan los años van naciendo menos niños y niñas, la diferencia con las defunciones todavía sigue siendo positiva. Esto es, la población no se reduce, sino que crece, al menos en la ciudad autónoma. “A nivel local todavía tenemos un saldo vegetativo positivo, después incluso del exceso de mortalidad que se produjo en 2020”, explica Cantón.
Esta tendencia de descenso de la natalidad se está registrando desde hace más de seis años, “viene dándose desde 2014-2015”, puntualiza y diferencia de la bajada en el número de partos atendidos en el HUCE.
Familias que “deciden no tener hijos, o reducen el número porque se acorta el periodo fértil de la mujer, también han bajado el número de matriomonios... “ enumera Cantón algunos de los motivos sociológicos. “Poder encontrar una vivienda a un precio asequible, emanciparse de sus padres a determinada edad, esperar a tener estabilidad en el trabajo, todo este tipo de factores, también influyen en la disminución”, amplia alguno de los agentes que determinan tener hijos.
La pandemia del coronavirus no se queda al margen. El sociólogo apunta a que en muchos casos se habrá preferido esperar a que pase toda la crisis sanitaria antes de tener un hijo. Incluso, menciona el miedo a contagiarse en el hospital como otro de los posibles factores. Añade, asimismo, que “una cuestión sociológica en la ciudad es que los patrones de natalidad de familias musulmanas y cristianas son distintos”. Una diferencia que también “está cambiando”. “Ceuta tiene una de las tasas de familias numerosa más altas de España”, informa, pero “incluso las familias que tradicionalmente tienden a tener mas hijos por motivos culturales también están reduciendo sus familias”.
En todos los casos, ese descenso se debe, según el sociólogo, “al coste que tiene la crianza de los hijos”. También de la vivienda, “no es lo mismo mantener una casa para seis hijos que para dos”. Desde esta perspectiva sociológica, “es más difícil abordar los gastos de un hogar con muchos miembros y eso reduce la natalidad”, resume.
“Este patron de natalidad, de tener muchos hijos, es más propio de sistemas demográficos antiguos. El tener muchos hijos era una forma de seguridad en la vejez. Pero con los sistemas de protección actuales garantizan la jubilación y demás ayudas”.