La futura aduana comercial no posibilitará a Ceuta desarrollar un tráfico comercial de calado
FRONTERA
Marruecos ha querido dejar claro que esta aduana comercial solo servirá para “el pequeño tránsito de mercancías y no se permitirá la entrada de muchos productos”
Según la hoja de ruta trazada por el Gobierno de España y Marruecos de cara a la apertura de una aduana comercial en Ceuta, el próximo mes de enero tendría que producirse la apertura de la misma.
Muchas son las voces que han puesto en valor la apertura de esta aduana comercial, el último en hacerlo, y para este periódico, el secretario de Comercio y Turismo del Partido Socialista de Ceuta, Sebastián Guerrero Martín, quien aseguró que va a ser algo novedoso que va a traer prosperidad y generará beneficios económicos, poniendo de manifiesto que la aduana comercial de Ceuta gestionará la entrada desde Marruecos de camiones, con una inversión a corto plazo de 120.000 euros y otros 390.000 más adelante para construir una infraestructura de 300m2 en la que gestionar el acceso a la ciudad de camiones de tamaño medio, y que permitirá incrementar de manera organizada y ordenada los flujos comerciales entre la ciudad y su entorno, algo que como aseguró Guerrero Martín, “será clave en nuestro futuro económico”.
Sin embargo, no todo el mundo confía de la misma manera en la apertura de dicha aduana comercial y de los beneficios y la prosperidad que pueda traer la misma a Ceuta y los ceutíes. Los propios transportistas mostraban recientemente su malestar por no contemplarse el tránsito de vehículos de más de 3.500 kilos, lo que implicaría que las únicas mercancías permitidas serían las que pudieran caber en camionetas o furgonetas grandes con uno o dos palés, no en camiones de mercancías ni contenedores, de peso muy superior, algo que como han indicado supone una gran limitación, ya que significará para “Ceuta la imposibilidad de desarrollar un tráfico comercial de calado”.
Y es que las escasas explicaciones ofrecidas por la ya ex delegada del Gobierno, Salvadora Mateos, a finales del pasado mes de octubre sobre lo que será esta aduana comercial ha generado más dudas de las que ya existía, ya que durante su comparecencia resaltaba que “inicialmente esta aduana tendrá un carácter regional con el objetivo de regularizar el tráfico de mercancías entre dos territorios limítrofes” y, por tanto, no entre dos países, algo que también corroboró el delegado de la Agencia Tributaria, Ramón Lozano, durante la visita girada recientemente a la ciudad autónoma.
Este punto también ha sido confirmado por Marruecos, donde se ha querido dejar claro que esta aduana comercial solo servirá para “el pequeño tránsito de mercancías, y no se permitirá la entrada de ningún producto desde España, Europa, China, etc.”, tal y como así lo puso de manifiesto al diario ‘Hesspress’ un funcionario marroquí.
Ante estas manifestaciones y los pasos dados por Marruecos, todo parece apuntar a que es el país vecino el que está dirigiendo como deben ser estas aduanas comerciales y llevando la voz cantante en todo el proceso, con el fin de evitar cualquier paso mal dado que pueda entenderse como un reconocimiento de la soberanía española de ambas ciudades autónomas, ya que según fuentes consultadas, estaría respaldando esta llamada ‘aduana regional’ para evitar el ingreso de Ceuta y Melilla en la Unión Aduanera de la UE, ya que dicho ingreso, afianzaría a ambas ciudades en su carácter europeo al ahondar su integración en la UE y además Rabat no podría imponer limitaciones a la mercancía.
Quizás por ello, no sean pocas las voces que desde la ciudad autónoma se está insistiendo en que se den los pasos necesarios para entrar en la Unión Aduanera de la UE, tal y como aprobó hace ya casi once años la Asamblea de Ceuta, donde se acordó pedir al Gobierno de la Nación comenzar a negociar el ingreso en dicha unión, aunque hasta la fecha no se ha hecho nada al respecto, ni si quiera el actual presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que durante su visita a la ciudad tras la invasión perpetrada por Marruecos en mayo de 2021, aseguró que comenzaría a tramitarse dicha petición, pero como se suele decir, del dicho al hecho hay mucho trecho, y no se ha dado ningún paso hacia esa dirección y tampoco está contemplado en el Plan Estratégico Integral para Ceuta presentado recientemente en la ciudad por la ministra de política territorial, Isabel Rodríguez.