Los ceutíes alias ‘Tapi’ y ‘Pellejo’, detenidos por el secuestro de la suegra de un conocido narco

La víctima de este secuestro resultó ser la suegra de Iván HP, conocido como el Ivi, uno de los delincuentes más activos y conocidos de Sevilla. Según los investigadores, el secuestro fue una respuesta de un importante clan de narcotraficantes al robo de un alijo de droga, del cual acusaron al Ivi como presunto autor.

El secuestro se llevó a cabo por dos personas encapuchadas que irrumpieron en la vivienda de la mujer, portando cada una un arma de fuego. Mientras tanto, un tercer asaltante esperaba en la puerta con un coche de alta gama en marcha. Tras registrar la vivienda, obligaron a la víctima a subir al vehículo y huyeron a toda velocidad.

En un principio, nadie había logrado ver el vehículo en el que se marcharon los secuestradores, y solo el vago relato del marido de la víctima indicaba que eran extranjeros. La Policía activó rápidamente un amplio dispositivo de búsqueda, que los condujo hasta el Puerto de Sevilla, donde se activó la última señal del teléfono móvil de la señora, según fuentes judiciales.

Sin embargo, tras inspeccionar minuciosamente toda la zona portuaria y los contenedores, los agentes llegaron a la conclusión de que la víctima no se encontraba allí. Era posible que los secuestradores arrojaran el teléfono por la ventanilla del coche en ese lugar.

Después de una noche de intensas investigaciones, al día siguiente los investigadores detectaron el rápido desplazamiento de un vehículo robado desde la barriada de Padre Pío hasta Lisboa. Este coche coincidía con el utilizado por los secuestradores. A pesar de ser la época navideña, todos los miembros del Grupo de Atracos y Secuestros de Sevilla se trasladaron a la capital portuguesa, donde pasaron la Nochevieja buscando sin cesar a la mujer secuestrada.

Aunque no lograron liberarla, sí encontraron y recuperaron el vehículo utilizado por los secuestradores, gracias a la activación de los cauces internacionales de cooperación policial. Comenzó entonces una ardua y laboriosa investigación que, gracias a la presión policial inicial, llevó a la liberación de la víctima cinco días después, en las inmediaciones de su domicilio.

A pesar de la escasa colaboración del entorno de la víctima y el trasfondo opaco que motivaba el secuestro, los investigadores descubrieron que este había sido provocado por el robo de un alijo de drogas presuntamente cometidas por el yerno de la víctima, el Ivi. Este individuo, criado en el Polígono Norte de Sevilla, es conocido por ser uno de los delincuentes más activos de la zona y cuenta con antecedentes de diversa índole.

En el transcurso de la investigación, se precisó determinar que uno de los principales responsables detrás del secuestro era Javier MV, conocido como el Lanas, quien era uno de los señores del Guadalquivir encargado de introducir grandes cantidades de hachís por el río. El Lanas, quien se encontraba fugado de la justicia en el momento del secuestro, fue finalmente detenido durante la Nochevieja de 2022 cuando salió de su casa en Umbrete para celebrarla con su hijo.

Los agentes de policía continuaron siguiendo el rastro y concretaron que Ceuta fue el lugar desde donde se había planeado el secuestro. Fue allí desde donde se envió a la familia una prueba de vida en forma de un video, que generalmente se utiliza en este tipo de delitos para demostrar que la persona sigue con vida, además de presionar para obtener el pago exigido. Gracias, a que la Policía logró interceptar este video, esto ayudó avanzar aún más en la investigación.

Detrás del video se encontraron ni más ni menos que el mayor distribuidor de hachís en las costas de Andalucía y el sur de Portugal, Abselam MM, alias Tapi, y uno de sus lugarestenientes, Abdelilah AT, conocido como Pellejo. Tapi era el verdadero propietario de la mercancía robada y, según los investigadores, fue él quien seguramente ordenó el secuestro, y a través de uno de sus hombres de confianza, el Lanas, se llevó a cabo el rapto de la mujer.

La operación policial se desarrolló en diversas localidades como Sevilla, Algeciras, Cabrera de Mar (Barcelona), Dos Hermanas, Ceuta, Estepona y Lisboa. Durante más de 18 meses, los funcionarios recopilaron suficientes pruebas para imputar a siete individuos, de los cuales cinco fueron detenidos por su implicación en los hechos. No se descartan futuras detenciones.

La operación ha sido denominada “Massamá”, en referencia al barrio de Lisboa donde los secuestradores abandonaron el vehículo utilizado para trasladar a la mujer secuestrada. Gracias a las detenciones de los principales actores involucrados en el tráfico de hachís, el comercio de estupefacientes en la ciudad de Sevilla ha sufrido un duro golpe, ya que se ha interrumpido su estructura, lo que tomará tiempo para recuperarse.